Habréis visto millones de veces a este singular neko (gato) en televisión o saludándoos desde multitud de escaparates o tiendas orientales. Si no sabéis qué representa este gatito, podréis pensar que es otra costumbre japonesa sin importancia; pero es que en el país del Sol Naciente, todo tiene su por qué, y este gatito también tiene su leyenda.
En el siglo XIII, había un templo pobre y derruido en Tokio. El sacerdote del templo era muy pobre, pero él compartía lo poco de comida que tenía con su gatito, Tama. Un día, un hombre adinerado e importante se encontró en una tormenta mientras estaba cazando; el hombre se refugió bajo un árbol grande cerca del templo. Mientras esperaba que pasara la tormenta, el hombre vio a un gato que levantaba la patita hacia él, como llamándolo para que entrase en las verjas del templo. El hombre se sorprendió, así que dejó el resguardo del árbol para poderse acercar más a este gato raro que le hacía señas. En ese momento, el árbol cayó fulminado por un rayo. Gracias a esto, el hombre rico se hizo amigo del sacerdote y su gato, donó grandes cantidades de dinero al templo y allí nunca volvieron a tener hambre.
Cuando Tama murió lo enterraron en el Templo Goutokuji, y se creo el Maneki Neko en su honor.
Maneki = Procede del verbo maneku ("invitar a pasar" o "saludar").
Neko = Gato.
Es decir, literalmente "Gato que invita a entrar" o "Gato que saluda". El mensaje que siempre quiere transmitir el maneki neko es siempre "Entra, por favor. Eres bienvenido".
-Si la figura levanta la patita izquierda significa que intenta atraer clientes o visitas; si, en cambio, levanta la pata derecha, atrae dinero y prosperidad. Y cuanto más alzada esté la patita, más prosperidad o visitas atraerá.
-Dependiendo de su color tambien tiene distintos significados:
- Tricolor: Es el más popular. Da buena suerte para viajar.
- Blanco: Indicativo de pureza.
- Negro: Talismán contra el demonio.
- Rojo: Contra el demonio y las enfermedades.
- Dorado: Atrae el dinero.
- Rosa: Atrae el amor.
